Noticias

6/recent/ticker-posts

La Organización Mundial de la Salud recomienda no fumar ni consumir ningún tipo de tabaco.

  Formas de reducir el riesgo de cáncer.

 
La Organización Mundial de la Salud recomienda no fumar ni consumir ningún tipo de tabaco.  El consumo de cigarrillos es la causa directa del 20% de los cánceres que se diagnostican en Europa. Fumar puede provocar la aparición de 16 tipos diferentes de cáncer como el de pulmón, laringe, vejiga urinaria, estómago, esófago o páncreas.

  La Organización Mundial de la Salud recomienda convertir nuestro hogar así como también nuestro lugar de trabajo en una zona libre de humos. Apoyar estas políticas será beneficioso no solo para nosotros sino para todos los que nos rodean, ya que el humo de tabaco en el ambiente (conocido también como tabaquismo involuntario o pasivo) puede causar cáncer de pulmón en quienes no fuman (al menos 69 sustancias químicas en el humo de tabaco causan cáncer).

 Recomienda Tambien  hacer todo lo posible por mantener un peso corporal saludable. El sobrepeso y la obesidad en general, están asociadas a riesgos mayores de sufrir cáncer de esófago, de pecho, de endometrio, de colon y de recto, de riñón, de páncreas, de tiroides, de vesícula biliar y posiblemente de otros tipos de cáncer, según el Instituto Nacional del cáncer.

La Organización Mundial de la Salud recomienda realizar alguna actividad física en la vida cotidiana aunque sea a nivel moderado. De la misma forma nos aconseja que limitemos el tiempo que pasamos sentados, ya que el sedentarismo aumenta el riesgo de cáncer. Por cada dos horas adicionales de inactividad durante la jornada aumentan un 10% las posibilidades de desarrollar cáncer de endometrio (revestimiento del útero) en las mujeres, un 8% de sufrir cáncer intestinal y un 6% de desarrollar cáncer de pulmón.

 La Organización Mundial de la Salud recomienda seguir una dieta saludable teniendo en cuenta estas directrices: comer muchos cereales integrales, legumbres, verduras y frutas; limitar los alimentos altos en calorías (ricos en azúcar o grasa) y las bebidas azucaradas y, por último, evitar la carne procesada, reduciendo también el consumo de carne roja y de alimentos con alto contenido en sal.
 
Limitar el consumo de alcohol si estamos acostumbrados a tomarlo socialmente. Sin embargo, no consumirlo es mejor para la prevención del cáncer, según la OMS. Tomar alcohol habitualmente aumenta el riesgo de cánceres en la cavidad oral (excluyendo los labios), de faringe (garganta), de laringe, esófago, hígado, seno, de colon y recto.

 Evitar el exceso de sol, especialmente entre los más pequeños. De la misma forma, la OMS aconseja utilizar siempre protección solar de un nivel adecuado y no usar camas solares ni cabinas de bronceado o lámparas de rayos ultravioleta, puesto que aumentan el riesgo de sufrir cáncer de piel.

 Protegerse frente a sustancias que causen cáncer (carcinógenos), siguiendo las instrucciones de salud y seguridad. A nivel mundial, alrededor del 20% de todos los cánceres son atribuibles al entorno laboral, lo que supone 1,3 millones de muertes cada año. Los cánceres más frecuentes en el lugar de trabajo son: cáncer de pulmón, de piel, mesotelioma y cáncer de vejiga.

 La Organización Mundial de la Salud recomienda averiguar si estamos expuestos a la radiación de niveles naturalmente altos de radón en nuestro hogar. Si es así, aconseja tomar medidas para reducirlo si se trata de niveles altos. Hasta un 14 % de los casos de cáncer de pulmón están provocados por la exposición a este gas cancerígeno en el interior de los edificios.

Recomienda para las mujeres dos aspectos específicos para reducir el riesgo de cáncer: amamantar al bebé (la lactancia materna reduce el riesgo de cáncer de la madre) y limitar el uso de la terapia de sustitución hormonal (TRH) ya que aumenta el riesgo de ciertos tipos de cáncer.


Publicar un comentario

0 Comentarios