Santo Domingo. Dos de los fallecimientos se han producidos en el Robert Read Cabral, en donde regularmente son referidos los pacientes graves desde otros centros de salud, uno en el hospital de Taiwán, en Azua y otro en Santiago, afirmó.
En la provincia fronteriza también una niña de cinco años que fue mordida por un perro en marzo de este año, presentó los síntomas en julio y falleció también en el Robert Reid Cabral.
En abril murió en Santiago la señora Jackeline Espinal Martínez, de 54 años, contagiada por el virus con la mordida de un hurón.
En un comunicado enviado a los medios, el Colegio Médico atribuyó los casos que se han registrado en este año “a la falta de vigilancia epidemiológica” de las autoridades gubernamentales que se ha agravado con el cierre del Instituto Antirrábico.
De la misma comunidad
El niño que se encuentra ingresado con los síntomas de la enfermedad, según Terrero, reside en la calle Duarte del sector Campo de Aviación, la misma comunidad donde vivía el infante fallecido el sábado 15 de este mes.
Recibió la mordida en el dorso (parte posterior) de la mano izquierda.
No obstante, detalla que fue otro perro que lo mordió el 19 de noviembre. Hoy fue preparado para inducirlo al coma y suministrarle los medicamentos.
El subdirector del Robert Reid Cabral dice que el paciente ya ha recibido tres dosis de vacuna antirrábica para contrarrestar los síntomas.
RD había logrado tener casi dos años sin muertes
En junio del 2017, el director del Centro Nacional de Zoonosis (CENAZOO) informó en que en casi dos años el país no había tenido reportes de muertes a causa del virus de la rabia.
En una comunicación de prensa, Séntola Martínez atribuyó la disminución en la incidencia de la enfermedad a las acciones preventivas que desarrollaba el Ministerio de Salud en todo el país, incluida la realización anual de una jornada nacional de vacunación de animales.
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