SANTO DOMINGO.-
El Gobierno anunció este miércoles que en los próximos días dejará en
servicio de manera formal un conjunto de importantes autopistas y
carreteras ubicadas en las regiones del Cibao, Sur y la provincia Santo
Domingo.
De acuerdo al Ministerio de Obras públicas entre las autopistas que serán puestas en funcionamiento están el tramo I de la Circunvalación Santo Domingo, las carreteras Santiago-Navarrete, Sabana Iglesia-El Caimito, Licey-Santiago, y el tramo Baní-Azua.
El ministro de Obras Públicas,
Gonzalo Castillo, resaltó el impacto de estas obras viales en la
economía de los sectores productivos de las diferentes regiones del
país, tras señalar que las mismas contribuirán a mejorar el movimiento
vehicular y, por lo tanto, llevarán mayor seguridad a los conductores y
público en general.
De acuerdo con una nota de la
Dirección de Comunicaciones del Ministerio de Obras Públicas (MOPC),
Castillo dijo que en niveles muy avanzados se encuentran los trabajos
del tramo I de la Circunvalación Santo Domingo, previsto para ser
inaugurado a fines de este mes de febrero.
“El objetivo central que se persigue con esta importante vía es descongestionar el tránsito vehicular en el Gran Santo Domingo, en especial en áreas céntricas de la Capital”, sostuvo.
Obras públicas informó que cientos de obreros laboran en el tramo I de la Circunvalación Santo Domingo, a cargo del Consorcio Compreica-Alba Sánchez, en lo que se refiere a terminación de imbornales, canaletas, cunetas, pavimentación, señalización, y embellecimiento. Cuando esté listo el tramo II de la circunvalación, que será a fines de este año, unirá las tres principales regiones del país: Sur, Este y Norte.
Indicó que en lo que se refiere
a ampliación, reparación y remozamiento del tramo Baní-Azua, fueron
concluidos los trabajos a cargo de la Constructora Rizek y Pradera
Verde. Ese tramo, que forma parte del Corredor Vial del Sur, ha sido
asfaltado, señalizado horizontal y verticalmente.
Precisó que la reconstruida
autopista constará de dos carriles de 3.65 metros de ancho cada uno, un
paseo de dos metros, señalización vertical y horizontal a todo lo largo y
ancho de la carretera que conduce de Baní a Azua, y viceversa.
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